Durante el transcurso de Ventana Sur, la destacada actriz uruguaya que llamó la atención de todos a partir de su rol protagónico en “Whisky” valoró la distinción, que consideró “un reconocimiento enorme”, habló sobre su prolífica carrera y de su amor por el cine.

La historia de Mirella Pascual es la de una persona que encontró su vocación casi sin querer. Por curiosidad estudió teatro cuando estaba en Argentina, aunque luego estuvo mucho tiempo alejada de la actuación. Al volver a casa, ya con dos hijos y después de años, volvió a adentrarse en el mundo del arte para no irse más. Empezó con talleres y teatro para luego llegar al cine “de casualidad”, como le dijo al Semanario ABC quien acaba de ser distinguida como Ciudadana Ilustre de Montevideo.
Y menos mal que decidió volver: desde su reencuentro con la actuación, su talento y calidez le valieron un sinfín de oportunidades en teatro, cine y series que ha sabido aprovechar. El mundo la conoció gracias a “Whisky”, el primer largometraje del que fue parte en 2004. Su interpretación de Marta, una de las protagonistas, le valió premios en varios festivales internacionales (Lima, Guadalajara, Tokio, Miami, Grecia y Cartagena fueron algunos de ellos), además de una larga ovación en el Festival de Cannes. “Lo de Cannes fue impresionante, mágico. Ese lugar es increíble”, contó al respecto, antes de agregar: “Nosotros, los tres actores, vimos por primera vez la película proyectada ahí, en medio del público, en una sala llena. Al terminar la película hubo un aplauso cerrado, y de repente nos iluminaron a nosotros tres y estábamos ahí parados, en el medio de toda esa gente, de todo ese público aplaudiendo. Fue increíble”.
Desde entonces, la actriz uruguaya ha estado en múltiples películas, como “Miss Tacuarembó”, “La noche de 12 años”, “Alelí” y “Norma”, por citar algunos ejemplos. En los últimos años llegó a grandes plataformas internacionales como Primer Video y Netflix al actuar en series como “Iosi, el espía arrepentido” y “El amor después del amor”.
La trascendencia de ser reconocida como Ciudadana Ilustre de Montevideo durante el desarrollo de Ventana Sur, el impacto de “Whisky” y el valor del cine en su vida fueron algunos de los temas sobre los que Mirella Pascual se detuvo durante la charla.
¿Cómo te hace sentir el reconocimiento como Ciudadana Ilustre de Montevideo?
Me siento feliz, muy honrada y gratamente sorprendida por este reconocimiento inesperado para mí. La verdad que me sorprendió muchísimo. Pero sobre todas las cosas me siento agradecida, muy agradecida de verdad. Ahora solo me queda disfrutarlo.
¿Cómo fue el momento que le contaste la noticia a tu familia y allegados? ¿Cómo lo tomaron?
Cuando recibí la noticia se lo comuniqué inmediatamente a mi familia y a los amigos, aunque me daba cierto pudor. La respuesta de mi familia fue unánime: todos los comentarios eran de orgullo, mucho orgullo. Es una palabra enorme. Es muy lindo lo que estoy viviendo con este reconocimiento enorme.
Durante Ventana Sur habrá propuestas vinculadas a los 20 años del estreno de “Whisky”. ¿Por qué considerás que tanto tiempo después seguimos recordándola?
No tengo un por qué en especial. Creo que la película quizás es un conjunto de aciertos que la hacen redondita. Es sensible, es emocionalmente honesta. Podría decir muchas cosas, pero no soy objetiva porque estoy muy involucrada. Creo que es una película que obviamente no pasó desapercibida. Quizás es por la historia, por cómo está contada, por esos personajes, por ese humor tan particular para contar un drama, porque esas vida son…no se cómo denominarlas. Creo que siempre fue recibida con cariño, y así se recuerda en todas partes. Esa creo que es su magia.
¿Qué significó esa película para vos?
Esa película significó muchísimo en mi vida. Ya era feliz con estar participando de ese rodaje, que lo disfrutamos muchísimo. No esperaba nada adicional, a eso apuntaba. A mi ‘Whisky’ me colocó en un lugar que cambió mi vida desde entonces, porque me abrió una carrera que ha sido ininterrumpida en estos 20 años. Tuve altibajos, como todo el mundo, porque este oficio no es fácil. Pero vaya donde vaya, a cualquier país, en todos lados, soy la de ‘Whisky’. Eso me llena de orgullo. Fue algo que me sorprendió en la vida, pero que también me ha dado mucho.
¿Cómo recordas el proceso de composición de Marta dos décadas después de haberla interpretado? ¿Dirías que aún tenés un vínculo con ese personaje?
La composición de Marta fue un trabajo para el que por suerte tuvimos tiempo para hacerlo con los directores, y después interactuando entre los personajes. Fue apareciendo, se internalizó y funcionó muy bien. Cuando uno acepta el personaje, lo quiere y lo lleva adentro, después resulta como muy fácil hacerlo recorrer la historia. Lo recuerdo como un proceso lindísimo de aprendizaje.
Recuerdo a Marta, tengo un vínculo afectivo con ella, y muchas veces me veo diciendo ‘uy, esto es muy Marta’. Sí, es un personaje muy querible y muy querido por mí también. Creo que ella también me aceptó y me quiso para que yo pudiera interpretarla.
¿Qué significa el cine para vos?
Otra cosa que le debo a ‘Whisky’ es haber conocido el cine, que me deslumbró. Realmente un rodaje es en el mejor lugar en el que puedo estar. Es un trabajo maravilloso y mágico formar parte de algo que luego vas a ver en su totalidad, con lo que cada uno de los actores aportó. Se disfruta en el momento, se disfruta después, cuando ves el resultado. Es un trabajo que volvería a elegir, aunque llegué a él de casualidad. Estoy siempre aprendiendo de los directores, de ese ida y vuelta con los actores, conociéndolos y trabajando con actores que he admirado desde siempre. Es algo enorme el cine para mi.