La comuna presentó los resultados y avances de su Plan Departamental de Salud 2021-2025, cuyas políticas apuntan a promover hábitos alimentarios saludables y reducir las desigualdades nutricionales para mejorar la calidad de vida de las personas.

La Sala Azul de la Intendencia de Montevideo fue escenario de la presentación de los resultados y avances del Plan Departamental de Salud 2021-2025. Allí, se puso el foco sobre diversas políticas alimentarias impulsadas por la comuna durante el período, como el Programa de Apoyo Alimentario enfocado en niños, niñas y embarazadas que presentan desnutrición o bajo peso en el caso de las mujeres gestantes. Además, el programa Cantinas Saludables, que fomenta mejores hábitos alimenticios entre trabajadores y trabajadoras de dependencias públicas, estuvo sobre la mesa, así como otras propuestas como Barrio Saludable y Entornos Saludables, que incluyó un informe de inseguridad alimentaria en diferentes zonas de la ciudad que estuvo a cargo de la Universidad de la República.
Mauricio Zunino (intendente de Montevideo), Mercedes Clara (directora de Desarrollo Social) y Virginia Cardozo (directora de Salud) fueron algunas de las autoridades presentes durante un encuentro que contó, además, con representantes de la academia, trabajadores y trabajadoras de la salud, otros especialistas e integrantes de organizaciones sociales.
Las múltiples políticas llevadas adelantes tienen aspectos comunes: promueven hábitos saludables, ponen el énfasis en niños, niñas y embarazadas de sectores vulnerables de la sociedad, tienen perspectiva de género y se alinean a los Objetivos de Desarrollos Sostenibles (ODS) de Naciones Unidas.
Llegó a cientos de personas
Virginia Cardozo puso el foco sobre el impacto que está teniendo el Programa de Apoyo Alimentario, sobre el que manifestó: “Los datos nos muestran que estos años trabajamos con 715 niños, niñas o embarazadas detectados por las policlínicas de la Intendencia de Montevideo en todo el territorio que tenían un diagnóstico de desnutrición en esos niñas y niñas o bajo peso en las embarazadas. Se abordó el tema y se acompañó a estas familias: se les realizó transferencia monetaria para la compra de alimentos, se acompañó en la educación nutricional y social, y por supuesto en los controles de salud”.
Además, sobre la información recabada por investigadores de Udelar, afirmó: “Los datos muestran que el programa, con esta batería de acciones, logró incidir en la mejora del peso de los niños, niñas y embarazadas que fueron parte. Después de tres meses se puede ver en las gráficas una importante mejora en torno al peso para la edad y la altura, y el índice de masa corporal en las embarazadas. Además de la mejora nutricional, muestra también una mejora en la vinculación con otros programas. Notamos una mejoría importantísima en la participación en Plan Caif de las niñas y niños que se vinculaban con nosotros”.
Por todo esto, puede concluirse que “no solo mejoró el peso de muchos niños, niñas y mujeres embarazadas, sino la red de acompañamiento de todo el Estado a través de estas acciones. Creemos que muestran que son necesarias, y que el foco de las políticas públicas en infancia y en alimentación sigue siendo una necesidad en nuestro país”.

“Es la forma de trabajar”
La directora del Departamento de Desarrollo Social, Mercedes Clara, cree que “esta es la forma de trabajar: con la Universidad, con organizaciones, con instituciones, con colectivos. En ese ida y vuelta es que vamos logrando mejorar lo que hacemos. Este encuentro es una forma de compartir aprendizajes y tener pistas para seguir caminando con este compromiso”.
“Duele saber que hay tantas personas que no tienen garantizado el derecho a la alimentación y no pueden desarrollar el potencial que tienen adentro. Eso es una violencia inadmisible y que está en el centro de esta de mesa, de la sociedad y de la nueva gestión del gobierno que inicia. Tenemos el desafío de responder de manera urgente”, agregó.
Por su parte, el intendente Mauricio Zunino fue por una línea similar al manifestar que el encuentro “nos muestra el proceso desde donde venimos, cómo avanzamos y hacia donde tenemos que marcar esa hoja de ruta. Lamentablemente el derecho a la alimentación no está consagrado para todas y todos. Estos temas nos plantean un trabajo para la política pública, como la investigación, los contactos con la sociedad, con la academia, con la idea de mejorar y avanzar en la profundización de propuestas”.
Además, reafirmó el compromiso y dejó en claro que la proximidad del final de esta gestión no implica que estos pasos vayan a detenerse. Dijo: “Entendemos que se ha avanzado mucho pero todavía queda un largo camino para recorrer y seguir construyendo. Nuestro compromiso es seguir trabajando”.