El intendente Mauricio Zunino destacó la importancia de haber concretado un proyecto que revaloriza esa zona de Montevideo. Además, destacó lo decisiva que resultó la participación, ya que “lo mejor sucede cuando vecinas y vecinos se apropian del espacio”.

La inauguración del espacio polifuncional que será escenario de diversas actividades culturales, deportivas y muchas cosas más, como talleres e instancias de encuentro, supuso un momento significativo. El enorme potencial del Balcón del Cerro reforzará la oferta de propuestas disponibles en el oeste de la ciudad, dándole a vecinas y vecinos un establecimiento de calidad para recrearse, formarse y divertirse.
Durante el acto inaugural, el intendente Mauricio Zunino aseguró que la generación de un nuevo espacio donde históricamente funcionó el demolido Parador del Cerro tuvo por objetivo “reconstruir un espacio que estaba abandonado después del cierre del parador, volver a ponerlo en la jerarquización que tiene y poner en valor el barrio”.
Además, destacó lo importante que ha sido y seguirá siendo en todo el proceso la participación. Al respecto, afirmó: “Era necesario que este espacio empezara a tener cierto arraigo con las vecinas y los vecinos. Por lo tanto hubo todo un trabajo de sensibilización, de propuestas y de armado en conjunto de actividades. La directora fue parte de los equipos que trabajaron en contacto con el barrio, con las distintas organizaciones sociales de la zona, pensando qué tipos de actividades eran las que el barrio más demandaba”.
En el tramo final de su intervención, el intendente aseguró que en esa búsqueda por revalorizar el barrio, la generación del Balcón del Cerro contribuye “a seguir construyendo mucha más ciudadanía”. Asimismo, destacó que el centro cultural tendrá un amplio horario para así convertirse en un espacio de convivencia e integración, en el entendido de que “lo mejor sucede cuando vecinas y vecinos se apropian del espacio y son parte de esa construcción colectiva hacia adelante”.

“Un faro cultural y de comunidad”
Quién también participó de la inauguración del Balcón del Cerro fue la vicepresidenta de la República, Carolina Cosse, en cuya gestión como intendenta se gestó el proyecto que hoy es una realidad. Mencionó su “profunda emoción” por ver la concreción de un anhelo compartido con la comunidad, y celebró el hecho de que “donde antes había escombros ahora hay un nuevo espacio público polifuncional para que lo disfrute todo Montevideo”.
Además, se refirió al camino recorrido para llegar a este momento: “Siento una emoción enorme. Cuando hice campaña para la Intendencia de Montevideo mi gran sueño era construir algo así en el Cerro. A pesar del hostigamiento, de la escasez de rubros, en el marco de Montevideo Se Adelanta incorporamos este proyecto para hacer el Balcón del Cerro, que es este lugar maravilloso. Que tiene este espacio cerrado para albergar todo tipo de actividades, pero también tiene salas de reuniones, tiene talleres, tiene un espacio para niños, tiene una cocina industrial y tiene este maravilloso balcón, que genera más espacio público”.
Destacó, asimismo, que el proyecto “fue generado con un concurso público, apostando al talento nacional. Más de 40 proyectos se presentaron y ganó este”. Terminó considerando que el flamante espacio, “además de ser una flor para el Cerro, es una flor para la ciudad. Va a ser un faro cultural y de comunidad muy importante”.
“Se revitaliza un lugar emblemático”
La directora del Departamento de Cultura, Débora Quiring, también destacó la inauguración del Balcón del Cerro. “La idea era revitalizar un lugar emblemático. Creo que todos hemos heredado cuentos o hemos vivido las décadas de gloria del Parador del Cerro. Ahí se acercaban al barrio importantísimos artistas, desde Zitarrosa a Piazzola, Vinicus o Mercedes Sosa”, sostuvo.
Además, destacó el proceso que llevó a la selección del proyecto ejecutado: “Se presentaron 43 propuestas. La Intendencia llevó adelante un concurso junto con la Facultad de Arquitectura y el Municipio A con el propósito justamente de que esto fuera un lugar de referencia no solo para el barrio, si no también para la ciudad. Estamos hablando de un enclave con un alto nivel de vulneración social, que también se llevaron a cabo una serie de realojos”.